viernes, junio 16, 2017

MV Agusta RVS - "Speciale" - Galería

Esto es, según Agusta, lo que pasa cuando dejas que los diseñadores diseñen libremente y que los ingenieros plasmen en realidad ese diseño.



Continental ContiRoad Attack 3 - ¡Al límite!

¡Ser, o no ser! ¡Caer, o no caer! He ahí el dilema. Una disyuntiva tan ancestral como la invención de la moto misma, un umbral que aterroriza a tantos como emociona a muchos otros, no hay persona amante de las dos ruedas a motor que en una etapa u otra de su existencia a los mandos de una motocicleta no se haya planteado esta cuestión: ¿Dónde está el límite, cómo sé hasta dónde puedo inclinar sin caerme?


La respuesta más honesta a semejante inquietud es tal vez aquella que dice que sabrás que has encontrado el límite una vez te estés levantando del piso, sacudiéndote la tierra y calculando el monto de los daños, los pilotos profesionales saben esto de memoria y llevan señas tatuadas en su piel a lo largo y ancho de todo su cuerpo, solo que ellos no suelen pagar por los daños. Existen por supuesto alternativas menos radicales como el aprender a usar referencias, dos ejemplos: 1. Lo que los gringos llaman “Chicken Stripes”, concepto difícil de traducir sin que pierda su exactitud-humorístico-sarcástica, y que está por decir que la parte de caucho en la llanta que no se usado, es la “franja de las gallinas”, puesto de otra manera, los huevitos no te dieron para usar toda la llanta (y aquí me disculpan las señoras y señoritas por la analogía inguinal, que para nada pretende demeritar sus habilidades conductivas, sabemos que muchas de Uds. inclinan sus motos más que muchos de nosotros). 2. Los avisadores de los posapies. Para quienes no se han percatado aún de estos adminículos (no disponibles en todos los modelos), los avisadores son esos topes que sobresalen de las estriberas y cuya única función es la de ser la primera parte de metal en la moto que haga contacto con el asfalto durante la maniobra de inclinación produciendo un ruido estruendoso y un chispero impresionante, precisamente para avisarte que ya estás cerca al límite. Otra opción es ser consciente de la calidad de los cauchos que tienes montados en tu moto.