Coma ganó su quinto Dakar, bien merecido y con la ayuda del desperfecto de la Honda de Barreda que, hizo todo lo que pudo y demostró de principio a fin que merecía quedarse con el primer lugar. Pero el triunfo es de quien llega primero, no de quién hiciera más méritos.
Y méritos tampoco le faltan a coma, tipazo en todo el sentido de la palabra, carismático, y un as indiscutible de las motos, pensante cuando debió, rápido cuando tocaba, y su quinto triunfo llega como un merecido reconocimiento a uno de los mejores pilotos de la especialidad.
Aquí el resumen de su quinto Dakar, el último en moto según dicen, porque no apenas terminó el Rally empezaron los rumores de su paso a las 4 ruedas, con Toyota según dicen, y nada raro sería, solo estaría siguiendo los pasos de otros grandes que han cruzado ese camino.
Esperemos a ver qué pasa, sería una gran pérdida para las motos.